Ana Ferro fue la última pareja de Fernando del Solar. Vivieron juntos en una casa en Cuernavaca que ahora es reclamada por la ex esposa de Fernando, Ingrid Coronado.
Del Solar murió hace un año a causa del cáncer al que logró sobrevivir varios años y que le fue diagnosticado cuando todavía estaba casado con Ingrid.
Tras el divorcio, y cuando Fernando lidiaba con la enfermedad, apareció Ana Ferro en su vida y muy pronto conquistó su corazón. Desde 2016 se convirtieron en un a que no solamente compartía vida romántica, también levantaron un proyecto de talleres de transformación, que aprovechaban las habilidades de Fernando como motivador y de Ana como terapeuta.
Con la muerte de Del Solar, sin embargo, sucedió un encontronazo entre Ingrid Coronado y Ana Ferro por algunos bienes que, asegura Ingrid, Ana se ha negado a entregar y que son parte de la herencia que Fernando le dejó a sus hijos.
Ferro ha negado la acusación pero ahora que se cumplió un año de la muerte del conductor, ha surgido la versión de una trabajadora doméstica que convivió con ellos durante un año y que asegura que la terapeuta trataba mal a Fernando y se quería aprovechar de él.
“Un día llegó y le arrebató el plato”, contó Ángeles, quien asistió a una misa que le organizaron algunos amigos a Fernando del Solar y en la que fue entrevistada por reporteros de Imagen Televisión.
Contó que en una Navidad, ella llegó a la casa justo cuando Ana platicaba con uno de sus hijos por teléfono y que escuchó que le dijo: “sácale el mayor provecho que puedas”.
“En ese momento ella quitó`el altavoz porque se dio cuenta que yo estaba ahí y lo que hice fue pasarme a la cocina”.
Ángeles dice que decidió renunciar para no ver más el maltrato hacia Del Solar y que después de salir de la casa ya no pudo comunicarse con él porque Ana le controlaba todo, desde visitas hasta llamadas telefónicas.
Sigue el chisme:
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