En una ceremonia tan íntima como multitudinaria, Kelly Osbourne emergió como la figura central del adiós a su padre, Ozzy Osbourne, fallecido el 22 de julio a los 76 años.
La cantante, actriz y presentadora no solo encabezó los homenajes en Birmingham junto a su madre Sharon y sus hermanos Jack, Aimee y Louis, sino que además rindió tributo con una desgarradora carta que citó el emblemático tema “Changes”, que interpretó en dueto con él en 2003:
“Perdí al mejor amigo que tuve”.
Kelly Osbourne, símbolo de fuerza y vulnerabilidad ante la pérdida
Durante el cortejo fúnebre que recorrió Broad Street hasta el puente Black Sabbath Bridge, donde se erige el banco conmemorativo de la banda, Kelly tomó la mano de Sharon en uno de los momentos más desgarradores del evento.
Mientras su madre rompía en llanto ante los cánticos de “¡Te queremos, Sharon!”, Kelly la abrazó con ternura, luciendo gafas moradas en honor al estilo de su padre.
Miles de fans, ataviados con camisetas de Black Sabbath, lanzaban flores moradas, pancartas y cartas de despedida al paso del féretro. Al llegar al puente, la familia Osbourne depositó ofrendas, y Sharon alzó las manos en símbolo de paz, mientras colgaba del cuello el anillo de bodas de Ozzy en una cadena dorada.
La letra que selló un vínculo eterno
Días después del homenaje, Kelly compartió en redes sociales una imagen acompañada del fragmento de Changes:
“I feel unhappy, I am so sad, I lost the best friend I ever had”.
Este tema, lanzado originalmente en 1972 por Black Sabbath y reinterpretado por Kelly y Ozzy en 2003, se convirtió en una de las colaboraciones padre-hija más icónicas de la historia musical, alcanzando el número uno en las listas británicas. Hoy, esa misma letra funciona como epitafio emocional de una relación entrañable.
Sharon, Jack y Kelly: duelo familiar entre símbolos y apoyo
Cada integrante de la familia portó símbolos personales durante la procesión: Jack con un pin de cruz de plata, Aimee con un broche de murciélago, Louis con corbata morada de calaveras, y Kelly con sus gafas redondas. El momento más viral fue el abrazo colectivo a Sharon mientras depositaba una flor púrpura en el puente convertido en altar.
La banda local Bostin’ Brass interpretó “Iron Man” y otros himnos sabáticos mientras el cortejo atravesaba lugares clave como el estadio Villa Park, donde el pasado 5 de julio Ozzy ofreció su último concierto en el evento Back to the Beginning.
El homenaje que unió generaciones
La escena fue más que un adiós: fue un acto de amor colectivo entre una familia devastada y una comunidad global de seguidores, que vieron en Kelly no solo a la hija del ídolo, sino a una artista heredera del legado emocional y artístico de Ozzy.
En una frase resuena toda la pérdida:
“Perdí al mejor amigo que tuve”.
Ese mensaje encapsula el duelo de una hija que, con temple y sensibilidad, encabezó una despedida inolvidable.