La escena se vio dramática: Juan Soler corre de un lado a otro de la cocina de Top Chef VIP para terminar el montaje de su platillo. El tiempo se acaba y en su afán por llegar rápido cae estrepitosamente.
Soler se resbaló y cayó de espaldas con tanta fuerza que todos sus compañeros se acercaron para preguntarle si estaba bien.
Juan se levanta y responde que sí y continúa con el programa.
Lo cierto es que a partir de ese momento, Soler comenzó a tener problemas de salud.
El actor se había convertido en uno de los favoritos para llegar a la final del reality show de cocina producido por Telemundo, sobre todo por su habilidad para cocinar carnes blancas y rojas.
¿Qué le pasó a Juan Soler en Top Chef VIP?
Top Chef VIP, además, está en su etapa crucial, por lo que la caída de Juan Soler resultó preocupante ya que el reality se graba con un colchón de una semana, es decir, que lo que se transmite fue grabado días antes.
De modo que en los programas de los siguientes días, el televidente verá a Juan Soler retirarse de la competencia para recibir atención médica.
El primer diagnóstico que recibió Juan fue un agotamiento extremo.
“Se le denomina burnout, acompañado también de un mal cuidado, la verdad”, dijo Soler la mañana de este 17 de septiembre, luego de pasar un día en el hospital.
Es decir, que cronológicamente la mala racha de Soler fue así: sufre la caída durante el programa grabado el fin de semana. Regresa para las grabaciones del lunes pero se siente mal y es llevado al hospital. El diagnóstico no es grave pero el médico le hace severas recomendaciones. Juan Soler decide renunciar a partir de ayer martes.
¿Cuál es el padecimiento que sufre Juan Soler?
El actor contó que, ahora que lo ve en retrospectiva, fue natural que su cuerpo reclamara.
“Se graban dos programas por día de lunes a viernes, y sábados y domingos yo tomaba clases por fuera con un chef que yo contrataba personalmente, entonces no había descanso. Y llegó un momento donde sí, el cansancio fue extremo y sufrí un golpe de deshidratación también muy severo que me llevó al hospital, tal cual, para que me tomen los vitales y esas cosas, y afortunadamente me dijeron que fue eso”.
Si solamente hubiera sido la deshidratación habría bastado con reposo de unos días y suero. Los médicos sin embargo, encontraron algo preocupante, por lo menos lo suficiente para que Soler dejara la competencia.
“Me dijeron que había ahí una pequeña discrepancia en las mediciones de lo que es la parte renal, pero bueno, bien atendido, se solucionó todo y hoy estoy perfectamente bien, afortunadamente. El doctor me dijo: ‘Qué bueno que tomaste la decisión de salirte y atenderte, porque sí podía haber llegado a mayores’, pero no, nada que ver con arterias tapadas y de infarto, todas esas cosas no, nada que ver. Estoy perfectamente”.