En entrevista para el programa Sale el Sol, Alejandra Ávalos reveló una verdad poco conocida sobre la relación entre Florinda Meza y Chespirito.
La también prima segunda de la actriz aseguró que las veces en que se veía a Florinda “gritarle” a Roberto Gómez Bolaños, en realidad respondían a un problema de salud del comediante: su pérdida de audición.
“No era maltrato, era necesidad”
Ávalos explicó que su famoso primo político ya no escuchaba bien en los últimos años de su vida y que, aunque utilizaba un aparato auditivo, muchas veces se lo quitaba porque le incomodaba el ruido ambiental. En esos momentos, Florinda debía alzar la voz o incluso gesticular más para que él entendiera lo que le decían.
Le repetía las preguntas de la prensa
“Roberto Gómez ya no escuchaba… y cuando iban al chacaleo, Florinda a veces no repetía la pregunta, pero sí contestaba lo que él no escuchaba. No era que le hablara feo, era que tenía que hablar fuerte para que él entendiera”, aclaró la intérprete de Tu hombre y yo niña.
“Tenía que usar un aparato para escuchar, a veces no lo llevaba porque le incomodaba, porque la gente que lo usa escucha mucho ruido, más la música. Cuando lo entrevistaban Florinda le repetía gritando la pregunta y sí, a veces contestaba lo que él no escuchaba”
“No, pero es que le hablaba muy feo. Pero no sabe las circunstancias”.
La cantante también destacó que Florinda fue el último y gran amor de Chespirito durante más de 40 años, y que lo acompañó hasta sus últimos momentos de salud complicada. Por eso, pidió respeto hacia el luto y la memoria del creador de El Chavo del 8 y El Chapulín Colorado, recordando que su fama y legado trascendieron fronteras y generaciones.
"¿Cómo le hablas a una persona que tiene eh fallas en su audición?” Pues le hablas duro. fuerte. Le gesticulas para que te lea la boca. O sea, haces cosas extraordinarias para que esa persona entienda de qué estás hablando. Entonces, eso también era una cuestión de que lo vivieron”.
La cantante añadió que ella fue testigo del amor que se tenían: “Yo lo viví. En las reuniones de la familia, en las Navidades, era Roberto, ¿quieres esto? Roberto, qué necesitas. Era su Robert, su amor”.
Con sus declaraciones, Alejandra Ávalos busca poner fin a una de las críticas más repetidas contra Florinda Meza, asegurando que, lejos de ser regaños, esos momentos eran muestras de cuidado y comunicación necesaria en una relación marcada por el amor y la complicidad.