Desde hace 7 años, Alexis Ayala vive lo que él mismo llama “una segunda oportunidad”. En 2018 padeció un infarto que lo mandó primero al quirófano y luego a la sala de terapia intensiva durante varios días. Las secuelas de aquella experiencia para Alexis Ayala no sólo fueron físicas, también económicas.
De hecho, físicamente el actor se encuentra totalmente recuperado pero en cuando a su economía, todavía vive una racha que lo mantiene al límite.
“Yo vengo de una quiebra ahorita y tuve que vender mi casa... el miércoles antes de entrar aquí, ese día todavía concreté la venta de mi casa”, dijo visiblemente emocionado en una conversación con Mar Contreras
Alexis empezó por narrar lo que vivió en 2018 con el infarto. Incluso lloró cuando la anécdota llegó al punto en el que salió del quirófano y recuperó la conciencia.
“Era como una película, de hecho voy a hacerlo un cortometraje algún día, porque me dieron un plato de papaya y un juguito de naranja de esos de hospital. Y en el momento en que comí la papaya, me di cuenta de que estaba vivo otra vez”.
¿Por qué cayó en bacarrota Alexis Ayala?
La recuperación después del infarto dejó al actor sin poder trabajar durante más de un año y provocó su primera bancarrota.
En el documental “Solo para mujeres”, narró también este episodio en el que fue el productor Nicandro Díaz el que le dio la oportunidad de volver a la televisión.
Ahora, Alexis tiene mayor estabilidad pero otra vez atraviesa por una crisis económica. Por lo menos así lo contó en La Casa de los Famosos México.
“No saben todo lo que hemos vivido; pero te juro que si hubiera vivido esto hace siete años, me hubiera dado otro infarto. Ahora sé que la casa es lo menos importante; yo sé que soy mucho más rico, a lo mejor con una casa menos cara pero tengo a mi esposa y mis hijas”.
Al final de la conversación, Alexis Ayala experimentó un momento de catarsis que hizo recordar aquella emblemática escena de la película “Lo que le viento se llevó”, cuando la protagonista jura que jamás volverá a tener hambre ni ella ni su familia.
Lo que hizo Alexis fue levantar las manos y dijo enfático: “Perdí muchas cosas pero como soy alguien que trabaja y que tiene sus objetivos claros, te juro que dentro de cinco años, así como perdí todo, voy a tener el doble”.