Fue la gran sorpresa en la cuarta temporada de La Casa de los Famosos de Telemundo, muchos lo consideraban como un “mueble” y un participante débil, pero contra todo pronostico, Rodrigo Romeh logró ser el primer finalista del reality show.
En la final de la emisión, el entrenador personal y creador de contenido fit quedó agarrado de la mano con la puertorriqueña Maripily Rivera, quien resultó ser la ganadora por votación del público.
Más relajado y asumiendo todo el boom mediático y la fama que ha ganado tras su participación en el reality show, el joven, de 34 años, concedió una entrevista al presentador venezolano Alejandro Chabán, en la que hizo confesiones que no se atrevió a hacer durante los cuatro meses que estuvo encerrado en la casa más famosa de la televisión.
En el podcast de Alejandro, le preguntó a Romeh, sobre qué debe tener una persona ideal para que él forme una relación, a lo que respondió:
“Que sea una persona completa, que emocionalmente se sienta ya completa, no que sea perfecta la persona, no es por ahí, sino que de cierta forma no hay una dependencia hacia mí, que me ha pasado muchas veces, ¿no? Que hay mucha dependencia y esto, entonces si la persona tiene ciertos temas resueltos pues más bien ya es una compañía, ya es una pareja, son personas que pueden crecer juntos y no tanta toxicidad”.
Lo que llamó más la atención del público y algo que desconocían sus casi dos millones y medio de seguidores, era un detalle sobre su orientación sexual: “Yo me considero sapiosexual”, dijo.
Chabán le preguntó qué era ser sapiosexual, a lo que Romeh respondió que era una persona que le atrae el intelecto de otra persona o que le llega a llenar.
Finalmente, el entrevistador le cuestionó sobre si entonces él no se enamoraba del género sino del conocimiento, a lo que Romeh aclaró: “Más bien que te atrae eso”,