Sobre las críticas que ha recibido por el cobro de fotos junto a ella, señaló: “No me importa, las seguiré cobrando”.
La historia de Luis David González, conocida como “La Venenito” en las redes sociales, parece estar teniendo buenos resultados. A pesar de haber sufrido discriminación durante su niñez, los proyectos ahora comienzan a llegar, presentándole un futuro prometedor: “No puedo más que agradecer a la gente que me sigue. Tengo muchos que me critican y no les gusto, pero al final todo suma. A mí los haters no me afectan. Si dejé la escuela por el bullying, el hate… ¿qué más da?”.
La Venenito asegura que, aunque los señalamientos no han cesado, ya no le importan y sigue con su vida sin mayor problema. “Antes me escondía de la gente por lo que decían de mí, lloraba por todo. Pero ahora que ya crecí, me vale madre todo. Si voy por la calle y me gritan algo, pues ¡felicidades! Pero antes sí me dolía mucho la discriminación… era muy feo: por mi apariencia, por vestirme así, por todo”.
La influencer fue coronada en la marcha de la comunidad LGBTQ+, algo que la llenó de felicidad, pues mostrarse tal cual es siempre fue su sueño.
“Nunca lo imaginé. Ni siquiera había podido asistir a las marchas antes, porque no fue fácil liberarme. Le doy gracias a Ángelo que me invitó. Esta marcha permite que muchos que no tuvimos visibilidad antes, ahora la tengamos”, expresó.
Con la sencillez que la caracteriza, González asegura que no vive de apariencias. Aunque sus outfits son muy reconocidos por sus fans, deja claro que prefiere lo económico: “A mí me halagan mis outfits y lo agradezco, pero no soy como otros influencers que quieren aparentar. Soy muy clara y les digo de dónde son las cosas: todo barato. Lo principal es que a uno le guste y no vestirnos para nadie más”.
La respuesta positiva del público ha sido una sorpresa para ella, pues nunca creyó alcanzar la popularidad que hoy tiene: “Sigo siendo la misma. Jamás imaginé que tanta gente me conocería. Para mí, vivir esto es pura emoción. Escuchar que la gente me sigue, me admira y le gusta lo que hago, me motiva. ¡Yo vengo de vender colchas! ¿Cómo me iba a imaginar esto?”.
Con los cambios en su vida, La Venenito planea seguir evolucionando.
Espera cumplir la mayoría de edad para comenzar su transición de género: “Ya fui con el doctor y me dijo que debo esperar, tanto por los permisos legales como para seguir desarrollándome. Aunque el permiso de mi mamá ya lo tenía, porque ella me apoya en todo.
“Operarme el busto es algo que deseo, además de mi tratamiento de hormonas”.
Hoy, su familia es su mayor soporte: “Mi mamá me apoya mucho, mis hermanas, mi papá… A él le costó un poco, pero ahora también está ahí. Están en cada proyecto que hago, siempre que sea para mi bien. Muchos creen que ando sola, pero no. Aunque mi mamá está detrás de mí, no me gusta exponerla”.
Con humor, La Venenito responde a las comparaciones que la vinculan con Ángela Aguilar, diciendo que se siente honrada: “¿Que me comparen con ella? ¡Por mí, bien! Es una gran cantante, guapa y famosa… ¿A quién le va a molestar eso?”.