“Cuando compré esta casa, el jardín fue lo que me encantó”, decía Maribel Guardia hace 6 años, cuando todavía era impensable que un día dejara de vivir ahí.
El cariño por ese pedazo de naturaleza comenzaba con la historia de un árbol gigante al centro. “Cuando llegué, me dijeron que estaba muy seco y que había que tirarlo. Ahora véanlo, está hermoso”.
Es el mismo árbol en el que Julián Figueroa, su hijo, montó una hamaca de dos metros para echarse a tocar la guitarra.
Este recuerdo lo compartió Maribel esta semana en un video en el que también reveló que se mudará porque la casa ya es muy grande para ella y para su esposo.
Recordemos que su hijo Julián, quien murió hace dos años en esa misma casa, vivía largas temporadas ahí, a pesar de que ya tenía su propia vida de pareja con Imelda Figueroa y su hijo José Julián.
Recuerdos de Julián Figueroa en la casa de Maribel Guardia
Una semana después de su muerte, Maribel publicó también un video en el mostró un altar que le había hecho a su hijo en la sala de la casa.
En esa sala, siempre ha habido un piano blanco a pesar de que ella nunca ha sabido tocar ese instrumento. En realidad, lo compró Joan Sebastian papá de Julián, para que lo aprendiera a tocar. Pero Julián siempre prefirió la guitarra.
La casa de Maribel es de dos plantas y un ático con caída de agua.
Tiene también un balcón que se le añadió hace 10 años para que Maribel pudiera disfruta aún más de su jardin.
En su recámara hay un cuadro en sepia en la cabecera y además está dominada por espejos y marcos en dorado.
Maribel tiene dentro de la casa su propio gimnasio, el cual, confiesa, no utiliza diario como mucha gente suelen pensar.
“Nomás le hago al cuento, como dicen en México”, dice la actriz de origen costarricense en un video publicado por el portal de arquitectura y bienes raíces Habitat.
Otra cosa que mantiene desde que compró la casa es un muro con su egoteca: un centenar de portadas de revistas en las que aparece.
Maribel ha atravesado por varias crisis desde la muerte de Julián y actualmente está en un pleito legal por la herencia de Joan Sebastian y la custodia de su nieto.
Eso, probablemente , también influyó en su decisión de cambiarse de casa y poner en renta la que actualmente ocupa.