Una joven ha causado sensación luego de haber “trolleado” a unos extorsionadores por teléfono
¡De no creerse! Muchos mexicanos han sido víctimas de estos famosos “extorsionadores por teléfono” que abusan de la vulnerabilidad social de la gente para aprovecharse de ella. Con una voz fingida y datos muy básicos sobre las personas a quienes desean estafar, estos delincuentes se han salido con la suya durante muchos años. Los números de personas que han caído en este tipo de robos cada vez han ido más en aumento, por lo que esta historia viral ayudará a más de uno a salvarse de ello.
Es la historia de una jovencita de nombre Annie Riloy, la cual en días pasados recibió una llamada telefónica en la que sufrió un intento de extorsión con el supuesto secuestro de su hija. Aparentemente estos ladrones ya habían llamado en ocasiones anteriores, por lo que Annie decidió seguirles el juego y, de paso, una broma: se puso en el papel de falsa madre de la secuestrada y comenzó la conversación que los estafadores querían que sucediera.
"¡Mamá, mamá, tranquila! deja de llorar ¿cuánto dinero tienes para que me suelten?”, se escucha decir a la supuesta hija, quien no es otra más que un miembro de estos rateros por teléfono. Por su lado, Annie comenzó a exagerar la situación “llorando” descontroladamente. "¡Tranquila, mujer! ¡Ya no llore!” le grita uno de los hombres del otro lado del teléfono, mientra la bromista se aguanta las risas por los hechos.
"¡No le hagan nada a mi hijita” apenas se alcanza a entender entre el llanto y los gemidos fingidos de la chica que, entre broma y broma, se burla de los tipos que tratan de sacarle dinero. “Su hija nos dijo que ustedes son personas de bajos recursos, así que déjeme echarle la mano. Sea sincera: ¿cuánto dinero tiene?”, dice el secuestrador, a lo que Annie le responde con ironía: “No, señor. Yo cobro hasta el 28".
Puedes ver el video completo aquí:
La situación rápidamente se convierte en algo gracioso cuando la mujer se pone cada vez más histérica y comienza a actuar de manera “insólita”. Los secuestradores, por otro lado, se molestan y amenazan con “cortarle un dedo a su hija”.
Finalmente ella les hace ver que todo se trata de una broma, tanto de su parte como la artimaña que ellos planeaban jugarle a la pobre chica. Cuelgan el teléfono y ahí termina todo.
INFORMACIÓN, FOTOS & VIDEO: REDES SOCIALES ANNIE RILOY
TEXTO: ALONSO NORIEGA F.
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