Diversos estudios demuestran que el antioxidante xanthohumol, presente en un ingrediente de la cerveza, promueve la fertilidad en los hombres
Si estás pensando en tener hijos y eres hombre, es importante que tomes en cuenta llevar una dieta que te ayude en el proceso de concepción con tu pareja.
La fertilidad masculina puede verse afectada por factores ambientales y el estilo de vida, así que los espermatozoides pueden estar dañados a causa del estrés oxidativo, lo que desfavorece la calidad del esperma.
Médicos endocrinólogos recomiendan a los varones seguir una dieta rica en antioxidantes, pues está probado en estudios que éstos protegen el ADN del esperma contra el estrés oxidativo, y aumenta las tasas de embarazo.
Uno de esos antioxidantes es el xanthohumol, que se encuentra en el lúpulo, uno de los principales ingredientes de la cerveza. De tal suerte que esta bebida resulta un buen auxiliar en el mejoramiento de la fertilidad de los hombres.
El lúpulo es una planta trepadora del género cannabinaceas originaria del Japón que se emplea para aromatizar la cerveza y obtener el característico sabor amargo de la bebida. Además de contribuir a la estabilidad de la espuma, el lúpulo aromatiza y tiene propiedades antisépticas por lo que
las cervezas lupuladas son más resistentes al deterioro microbiológico.
¿Entonces, en qué medida es bueno beber cerveza en aras de conseguir un esperma saludable? Según un estudio publicado por investigadores de la Clínica de Fertilidad del Hospital Policlínico de Milán, Italia, señala que consumir una cerveza al día provoca que los hombres sean más fértiles.
Además de contribuir a la fertilidad masculina, el xanthohumol ayuda a combatir el cáncer que más perjudica a las mujeres: el de mama.
Un estudio de la Universidad de Oporto valoró el comportamiento de tres compuestos fenólicos como el galato de epigalocatequina del té, el resveratrol del vino tinto y el xanthohumol de la cerveza, y encontró que éste último sería el polifenol que más reduciría las células cancerígenas de mama, mostrando sus efectos más rápidamente en concentraciones más bajas.
TEXTO: VÍCTOR SANDOVAL
