Matías, el hijo del cantante Emir Pabón y la actriz Stefanía de Aranda, cumplió cuatro años rodeado de amor, alegría y una celebración llena de magia. Sus padres le organizaron una fiesta temática inspirada en Spider-Man, el personaje favorito del pequeño, en un lugar que él adora y disfruta en cada visita. En exclusiva para TVyNovelas, la pareja compartió la emoción del festejo.
“Nos sentimos muy bendecidos de vivir este día tan especial. El hecho de que Dios le permita un año más de vida, para una madre, es lo más grande, la mayor bendición que podemos tener. Él escogió el lugar, el personaje y hasta los snacks, así que está muy contento”, dijo Stefanía a TVyNovelas sobre lo plena que la hace sentir ver a su hijo feliz.
Por su parte, Emir, no pudo contener la emoción al hablar de su primogénito: “Matías es la prueba viva de que los milagros existen. Son cuatro años de una vida llena de retos. Llegó a nuestras vidas en un momento complejo y nos ha enseñado tanto. Verlo feliz y celebrarlo es lo mejor que nos puede pasar”, enfatizó.
La fiesta estuvo llena de momentos entrañables, algo que, según Emir, lo hace sentir muy feliz, pues la felicidad de sus hijos es lo más importante: “Me reflejo mucho en Matías. Es una bala, un niño desinhibido, inquieto y lleno de alegría, igual que yo de pequeño. Es un buen niño, un gran hijo”, expresó.
Aunque Emir y Stefanía han asumido el desafío de ser padres con amor y compromiso, admiten que no ha sido sencillo. Es muy difícil ser mamá, porque no se trata sólo de traer hijos al mundo, sino de guiarlos para que sean buenas personas, que sigan el camino correcto y sepan distinguir entre el bien y el mal. Es agotador, porque muchas veces luchas contra su carácter. Como madre, me duele regañar, pero sé que es necesario”, dijo Stefanía.
Ambos coincidieron en que el mayor reto es equilibrar la crianza con el autocuidado. “La paciencia es clave, pero también es importante darse espacios para respirar”, añadió la actriz.
Aunque ser padres les ha cambiado por completo la vida, el cantante aseguró que ha valido la pena: “La dinámica cambia, pero esos momentos difíciles fortalecen el amor familiar. Cuando tienes un hijo, comprendes el verdadero significado del amor”.