El pasado 23 de abril, Marjorie de Sousa llegó a los 45 años disfrutando al máximo la maternidad y los descansos que se ha dado mientras no está trabajando en alguna telenovela.
Según la actriz, atraviesa por una etapa de armonía que ningún ruido externo puede arruinar. “Llega en un momento de mucha tranquilidad, de mucho agradecimiento, mucha paz. Mucho entender que a veces nos perdemos en cosas que no son realmente importantes y creo que me siento muy tranquila; muy en calma, muy feliz, muy arropada, llena de gente maravillosa que ha llegado a mi vida a enseñarme que sí existe la amistad, que sí existe un amor bonito, verdadero”, dijo la venezolana en entrevista con TVyNovelas.
Para Marjorie es muy importante tomar conciencia de las experiencias que van sumando los años y así lo refirió: “Agradecida, como siempre lo digo, por todas las cosas que pasaron, agradecida por toda la gente que pasó por mi vida y me enseñó, entonces me siento muy bien, me siento feliz, me siento radiante, me siento preparada, me siento en el aquí y en el ahora. Yo creo que experimentando las altas y bajas, las bajadas son la parte más fuerte de esto, en todos los sentidos, la soledad, me ha tocado poner en una balanza qué quiero. Esta carrera es maravillosa, sí hay muchos aplausos, pero también hay mucho silencio”.
Disfrutar su trabajo ha sido una de las prioridades de Marjorie, quien despuntó su carrera en México después de triunfar en su país natal, así como en Estados Unidos, donde grabó su éxito más comercial: Gata salvaje
“Yo amo lo que hago y ahorita tengo un equilibrio, que es lo más difícil en la vida, conseguir un equilibrio entre lo que haces”. La artista reveló a esta publicación que muchas veces se cuestionó la felicidad absoluta, pero hoy entiende que sí puede conseguirse. “Yo siempre pensaba que si tenías éxito en tus proyectos no tenías éxito en el amor o te faltaban otras cosas. Pero es real, sí lo puedes conseguir. El tema es que yo siento que tienes que trabajar cada espacio para lograr ese equilibrio en todo lo que te propongas en la vida. Está en nosotros”.
“SER MAMÁ ME CAMBIÓ LA VIDA”
Tener a su hijo, Matías Gregorio, ha sido el mejor regalo de la vida, por eso lo atesora a cada instante.
“Ser mamá me cambió la vida, veo la vida totalmente diferente. Aquello que te importaba antes, hoy lo ves distinto y tiene otra prioridad. Mati es un niño espontáneo, un niño bondadoso, un niño hermoso, amable, buen hijo, es superconversador, entiende muchísimo las conversaciones que yo me muero de la risa porque siento que estoy hablando con un adulto, pero es un niño de ocho años. Puedo decirte que es tan maduro, tan bonito.
“Es hermoso, es un ángel y hablo de su corazón. Es un niño lleno de muchísimo amor interior, es inteligente; tiene una paz y le aprendo mucho. También me doy cuenta de muchas cosas que tengo yo, es mucho mi espejo”.
Según la protagonista de melodramas como Hasta el fin del mundo, “hay temas que a él le frustran mucho, no le gusta perder y a mí tampoco, entonces es muy loco porque cómo le explicas si tú tampoco sabes perder. Eso me ha enseñado a trabajarlo y es muy bonito, la verdad es que con Matías ha sido otro nivel la vida”.
Durante nuestra conversación, la ex reina de belleza estuvo pendiente de su celular y así explicó lo que sucedía: “Es que empiezan a sonar las alarmas. Que si la alergia, que si las vacunas, la gota del ojo y vivo llamando a mi mamá, pero me encanta mi vida, me siento muy feliz y muy plena”.