Carmen Treviño tiene tres discos. Se retiró de la músico cuando se separó de Pepe Aguilar porque quiso dedicarse a la crianza de su hijo Emilio.
Hoy Emilio es un rapero que se abre camino en la industria de la música y ha comenzado a acumular éxitos sobre todo en internet: ya tiene 100 mil seguidores en YouTube, la principal plataforma en la que difunde su música.
Pero en el aspecto personal, Emilio y su madre atraviesan una crisis por las peleas con Pepe Aguilar y sus hijos, es decir, los medio hermanos de Emilio.
Entre otras cosas, se han comparado con perros y se han mandado mensajes insultantes en los que se lanzan acusaciones sobre su vida personal.
Los beneficios del escándalo
Los Aguilar aseguran que Emilio es un mal padre que se niega a darle una vida digna a su hija (una bebé de dos años) mientras que Emilio los tacha de mentirosos y de atacarlo para discriminarlo.
Sin embargo, y aunque evidentemente la pelea familiar es un trago amargo, algo bueno ha salido de todo este pleito para Emiliano y su madre.
“Mi mamá tenía tres mil suscriptores ya así ahorita tiene casi los 100 mil, no tengo como agradecerles”, dice Emiliano en uno de sus acostumbrados videos en Instagram.
Carmen Treviño tenía una voz privilegiado y llegó a estar dos veces en Siempre en Domingo. Cuando se separó de Pepe Aguilar, se convirtió en madre y padre de Emiliano, quien siempre se muestra agradecido con ella.
Sin embargo, lo que detonó la pelea actual entre los Aguilar fue que Pepe dijo en una entrevista que Carmen se había salido de la casa marital de un día a otro, sin avisarle, llevándose al niño, los muebles y hasta el coche.
Beneficio doble del escándalo
Emiliano Aguilar niega las acusaciones y a cada mensaje de sus medio hermanos y su papá, responde con otro video.
Por eso, de manera natural, ha generado empatía y sus seguidores, igual que los de su mamá, han subido.
Ahora tiene ya 100 mil seguidores en Youtube.
“Eso está bien loco para mi. Un saludo para la disquera con la que anda para ver cuando me dan la placa esa ue dicen 100 mil, un logro mío”