Aunque MOISÉS ARIZMENDI creció sin su papá, asegura: ?Por fortuna tuve primos, tíos y un hermano mayor que fungieron como la figura paterna que me faltaba?
Moisés Arizmendi confesó a TVyNovelas que vivió una catarsis con su personaje en la película Cuernavaca, en la que da vida a ?un hombre que no se quiere hacer cargo de su responsabilidad como padre?, pues el actor en la vida real vivió una historia similar al carecer de una figura paterna en su vida. Afortunadamente, esta situación lo transformó de forma positiva ahora que es un adulto y que tiene un hijo de nueve años al cual adora.
?PERDÍ A MI MADRE INCLUSO ANTES QUEA MI PADRE?
Desde tu punto de vista, ¿cuál es el mensaje central de la película?Que tenemos que crecer a pesar de los padres que tenemos y de las circunstancias en las que vivimos; en la película, a Andy, un niño de 10 años, se le muere la mamá en un asalto fortuito y entonces se da a la tarea de buscar al papá, pero en su encuentro con él, se da cuenta de que no es quien él pensaba, porque no le responde, ahí está la tragedia de la película, este mundo donde desgraciadamente los padres se desentienden de los hijos.
¿En la vida real viviste una experiencia similar a la de Andy?
Sí, fue mi caso; cuando fui niño mi madre se hizo cargo de todo, pero también es el caso de millones de familias monoparentales, de madres trabajadoras y padres ausentes; por fortuna, creo que eso está cambiando en esta generación. Ahora que soy padre y muchos de mis amigos también, veo que hay otro tipo de relación con los hijos, aunque ese modelo del hombre latinoamericano que tiene hijos y los abandona sigue presente.
Seguramente el hecho de tener un padre ausente fue muy duro para ti...
Mucho, porque te agarras de otras figuras paternas; por fortuna yo tuve primos, tíos y un hermano mayor que fungieron como esa figura que me faltaba. Es muy difícil vivir el rechazo de un padre, aunque éste se dé simplemente a través de su ausencia.Afortunadamente tuviste el apoyo de tu mami...
Sí, ella estuvo ahí siempre que pudo, pero perdí a mi madre incluso antes que a mi padre; todavía era muy niño, pero a diferencia de lo que sucede en la película, la familia materna de mi mamá me acogió. Por eso, cuando leí el guión dije: ?¡qué duro perder a tu madre!?, porque a mí me pasó e intenté agarrarme de lo que pude, pero no de mi padre, porque no estaba.¿Qué tanto influyó lo que viviste ahora que eres papá?
Muchísimo, desde que nació mi hijo siempre tuve claro que podría hacer cualquier cosa en la vida, pero con él tengo que estar siempre. Desde que llegó me sentí lleno de amor, y estar a su lado es una de las actividades que más disfruto y a la que más le dedico tiempo de calidad; procuro que él esté lo mejor posible, educándolo lo mejor que se pueda.