ARIADNE DÍAZ siempre se imaginó a su pequeño Diego llevándola al altar, pero casarse no era su prioridad
TEXTO: GABRIELA DE LOS SANTOS • FOTOGRAFÍAS: JAIME NOGALES, JOSÉ LUIS RAMOS, RODOLFO NOYOLA, WEB
Hace casi dos meses, Ariadne Díaz cumplió 32 años y fue una fecha inolvidable. Su pareja, Marcus Ornellas, decidió entregarle el anillo de compromiso luego de casi cuatro años juntos. Ya habían platicado sobre una boda, pero no sabían cuándo. Ahora ya hay compromiso, y aunque ella asegura que casarse no era su sueño, se encuentra muy feliz de vivir esta nueva etapa de planeación junto al hombre de su vida. Por ahora se encuentra en una pausa laboral, pero eso la ha ayudado a disfrutar más de su pequeño Diego, a quien se imagina entregándola en el altar.
¿Esperabas casarte con Marcus?
La verdad es que el plan de casarnos siempre estuvo, sólo que no sabíamos cuándo. Teniendo anillo y demás, aún no sabemos cuándo, pero la verdad es que estamos muy contentos. Creo que la boda entre nosotros lo único que va a ser es un buen pretexto para celebrar con toda nuestra familia, los que vengan de Brasil, amigos y todas estas cosas muy lindas.
¿Te pasaba por la mente que sería pronto? Fue una sorpresa muy linda que no me esperaba el día de mi cumpleaños.
Las mujeres siempre tienen esa ilusión de llegar al día de su boda... Sí, por supuesto, pero yo no soy la típica mujer que desde chiquita soñaba con casarse de tal o cual manera. Incluso, mi sueño de verdad era ser mamá.
Qué te decía él sobre este tema?
Siempre dijimos los dos que sí, pero no estábamos ni detrás ni mucho menos planeándolo.
¿Ya te imaginas a Diego de pajecito?
Eso sí me lo imaginé muchas veces, a ver qué hacemos, si me entrega en la iglesia o si me lleva el velo.
¿Ha cambiado la relación después de esto? Estamos muy contentos los dos. Marcus por ahora está trabajando mucho, y creo que el que esté tan ocupado también nos da estos espacios donde llegamos en la noche a platicar las cosas que nos pasaron a él y a mí. Son ya casi cuatro años juntos compartiendo alegrías, momentos difíciles, viviendo el día a día.
¿Cómo vives esta pausa en tu carrera?
Ha sido una etapa muy linda que decidí dármela, pero luego me malentienden. Por el momento, este 12 de octubre se estrena mi primera película. La hice hace tres años y estoy muy contenta por ello.
¿Y en cuestión personal?
Me estoy dedicando a mi hijo y a mí. Tengo ahora tiempo de poder acostarme en el sillón, ver series, leer; pasar por Diego a la escuela y todas estas cosas de la vida diaria que de repente creemos que no son tan importantes y al final son más que todo lo demás.
¿Qué personaje interpretarás en este próximo estreno?
A Mónica, una mujer celosa, psycho, muy distinta a mí. Mi esposo es Mauricio Ochmann, y Marta Hazas será la tercera en discordia.
¿Cómo fue la experiencia de tu primera película? De muchos nervios, pero sobre todo, me acuerdo que estaba en mil cosas. Viajaba a Cancún (ahí eran las grabaciones) todos los domingos por la noche y me quedaba hasta el jueves en la noche porque volaba de vuelta a la CDMX, donde tenía función de La Dalia Negra los fines de semana. Mucho caos, porque poco tiempo después me embaracé, entonces fue una etapa padre, muy loca, revolucionada pero a la vez linda.
¿Qué te gustaría decirle a Marcus?
Que lo amo mucho, que estoy muy orgullosa de él.
