AISLINN DERBEZ y MAURICIO OCHMANN nos cuentan cómo viven el día a día y su debut en la moda
TEXTO: NAYIB CANAÁN FOTOS: JAIME NOGALES, CORTESÍA
Juntos han hecho películas, bebés y ahora hasta ropa, pues Aislinn Derbez y Mauricio Ochmann debutan en el negocio de la moda con el lanzamiento de su línea de abrigos y chamarras: Ais & Mau, que les ha permitido unirse más como pareja y conocerse en otro plano. Ambos artistas se arriesgan con una propuesta personal, trabajando en equipo con sus mejores amigos y poniendo a prueba su creatividad y buen gusto. “ESTÁ LINDO INSPIRAR A LA GENTE” ¿Cómo ha sido esta unión en el plano empresarial? AISLINN: Pues increíble; estamos muy emocionados de que por fin es el lanzamiento oficial de nuestros abrigos en internet, y nos atrevimos a diseñar ropa con nuestros mejores amigos, Jaime y Fran, y esto era un sueño que quería cumplir en algún momento de mi vida, el cual veía como imposible, muy lejano, pero de repente se dio esta oportunidad de emprender en algo completamente distinto a lo que estudié o venía haciendo. Creo que también está lindo inspirar a la gente a que se arriesgue, independientemente de la rama en la que se ha formado, siempre puede hacer algo nuevo, no importa la edad ni nada. Entonces, incursionar en la moda era un sueño pendiente... A: Sí, es que a mí me encanta el diseño, todo lo que tenga que ver con ropa, moda... Me gusta tener ideas nuevas y se nos ocurrió esto.
¿Les gustaría expandir la colección y hacer más prendas? A: Por supuesto, tal vez hacer ropa de niño. Ahorita estamos haciendo para todo tipo de personas, de todas las edades, de todos los cuerpos, y lo que queremos es hacer cada año prendas distintas. Mauricio , ¿tú eres el modelo que Aislinn viste y desviste para hacer sus pruebas? Sí, la verdad es que esta colaboración ha estado muy padre porque he confiado en mi mujer desde que nos conocemos; confío mucho en su gusto y en general en ella para diferentes cosas o eventos. Aislinn es muy creativa, por eso me siento muy contento por esa parte. Ahora, en esto de los abrigos sí fue una colaboración de los cuatro, en la que me pareció importante arriesgarnos en el tema del diseño, en salirnos de los abrigos tradicionales, sobre todo en las propuestas para hombres, pues de repente las mujeres pueden ser un poquito más arriesgadas en su forma de vestir, y a los hombres nos cuesta salir de lo clásico. Entonces, romper con eso me encantó, y más hacerlo en familia, con amigos, así que estoy muy agradecido. “RESPETAMOS LAS INDIVIDUALIDADES” ¿Es lo mismo trabajar con la pareja que hacerlo con cualquier otro socio? A: No, es que tampoco está fácil, sí hay que tener mucho cuidado, porque luego hay que darle su espacio y su tiempo a cada rol, a cada cosa, y no puede ser todo negocio y trabajo. Entonces, no fue nada fácil y lo tuvimos que hablar, cómo íbamos a combinar el trabajo con la relación, porque también tenemos una productora y hay que saber separar y no mezclar todo, hay que nutrir la parte de pareja. Yo creo que eso ha sido lo más complicado. En parte es una forma de compenetrarse más... A: Por un lado, sí, pero también ha sido perfecto para aprender a equilibrar, ya que no podemos estar todo el día hablando de los proyectos.
¿Qué aprenden cada día? MAURICIO: El aprendizaje y el crecimiento están en respetar las individualidades, los puntos de vista, aprender a equilibrarlos, a conjugarlos, y sobre todo a lo que dice Aislinn, a darle tiempo a cada cosa. Creo que eso ha sido lo más difícil y lo más importante en nuestra relación, porque al final, nuestra prioridad es nuestra relación de pareja, el matrimonio, la familia. Nosotros no dejamos que el trabajo se interponga, y por eso tratamos de equilibrarlo bastante. “LA EXPLOSIVA ES ELLA Y EL INTROVERTIDO SOY YO” En las redes sociales se ven como una pareja perfecta, ¿fuera de Instagram también son plenamente felices? A: La verdad es que tratamos de ser lo más transparentes posible, pero obviamente tenemos muchas crisis, como todo el mundo. Y también es padre mostrar que no somos la pareja perfecta; de hecho, estamos lejos de serlo. Nosotros también luchamos con nuestras crisis individuales, con las crisis de parejas... No siempre es fácil, pero creo que lo más lindo es acompañarnos en el camino, y siento que esas crisis nos ayudan a crecer, y lo vemos como etapas de mucho crecimiento, más que de conflictos. Cuando tienen esos conflictos, ¿quién es el primero en sacar la banderita de la paz? A: ¡Yo! Ay, por Dios, él se puede quedar tres días en la cueva.
¿Es cierto Mauricio? M: A ver, digamos que la explosiva es ella y el introvertido soy yo. A: Él se esconde, pero digamos que yo soy más transparente. M: Bueno, ya lo estás viendo aquí. Así es la dinámica, ella como que quiere arreglar todo en ese momento, y yo soy más de esperar. A: Es que él podría estar un mes enojado diciendo: “Luego hablamos”, pero yo soy de las que dice: “¡No! Hablamos ahorita”. M: Yo creo que con las emociones a flor de piel, uno termina equivocándose con lo que dice, con lo que hace. Entonces, soy más como de bajar un poquito, no estar enojado o muy triste. Es ahí cuando nos equilibramos. ¿De qué forma han compaginado sus funciones de padres con las de artistas? A: Ha sido una cuestión de mucha organización, de tener mucho cuidado con lo que elegimos, y sí, definitivamente creo que tenemos que descartar muchas cosas que antes hubiéramos podido hacer. Creo que ya no se pueden hacer, pues tenemos que darle tiempo a nuestra bebé. No nada más es trabajar, entonces, sí ha sido organizarnos y comunicarnos. [emb
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