Ya tiene libertad condicional y está empezando su microempresa, pero su vida sigue siendo un drama.
Desde su casa en Medellín, Lady Tabares cuenta en exclusiva cómo es su vida nueve meses después de haber recibido la libertad condicional, la relación con sus dos hijos, con su familia y qué sintió al ver la remasterización de la película que la lanzó a la fama.
?Se remasterizó La vendedora de rosas y quedó muy linda. También se sacó el detrás de cámaras, a manera de documental, que se puede ver en las principales salas de cine del país. Fue una experiencia muy bonita, lloré mucho cuando la vi. Eso sí, yo levitaba por el teatro el día del estreno?, dice.
¿Qué sientes cuándo ves la película?
?He visto La vendedora de rosas unas tres veces. Desde que terminó la filmación, en 1998, sucedieron muchas historias negativas en la vida de quienes participamos en ella. Perdimos a muchos del elenco. Por eso no era muy grato verla, porque quedaron muchos dolores. Luego sucedió lo de mi proceso legal, la cárcel? ¡muchas desgracias!?.
¿Y viste la novela?
?Nunca la he visto completa. También fue muy difícil, porque esa sí era mi vida real, y verla era un retroceso?.
¿Cómo está tu economía?
?Estoy cojeando, pero no moriré. Un día fui demasiado pobre, pedí limosna y vendí rosas para sobrevivir. Puedo decir que estoy bien porque no me estoy muriendo de hambre. Sin embargo, requiero un trabajo fijo para avanzar, y no tener que retroceder a vender rosas otra vez?.
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