Con una trayectoria consolidada en cine, teatro y televisión, y una sensibilidad actoral que crece con cada proyecto, Cassandra Sánchez-Navarro vuelve a impactar a la audiencia con una interpretación compleja y emocionalmente intensa como ‘Adriana’, una mujer víctima de violencia que termina convirtiéndose en criminar, en la nueva temporada de ‘Mujeres Asesinas’.
Cassandra se volcó por completo en la construcción de su personaje, que no solo representa un reto actoral, sino también una ventana hacia una realidad que viven muchas mujeres mexicanas.
Para lograr la autenticidad que exige una historia tan fuerte como la de Adriana, Cassandra Sánchez-Navarro decidió ir más allá de la ficción. Después del rodaje de su episodio, visitó el reclusorio femenil Tepozanes, en Nezahualcóyotl, Estado de México.
La experiencia no solo la conmovió profundamente, sino que transformó su percepción sobre el sistema penitenciario y las mujeres que lo habitan. “Fue una experiencia profundamente humana. Me encontré con mujeres que, como Adriana, han vivido historias terribles que las han llevado a tomar decisiones extremas”, dijo en entrevista con TVyNovelas.
Cassandra convivió con internas, escuchó sus historias, observó sus comportamientos, entendió su rutina y sintió en carne propia el peso del encierro.
“Salí con el corazón partido. No se trata de juzgar, sino de entender qué hay detrás de cada historia. Muchas están ahí por defenderse, por miedo, por no tener otra opción”.
Mujeres asesinas ha sido una serie emblemática de la televisión mexicana por su capacidad de contar historias duras con sensibilidad y fuerza dramática. Para Cassandra, haber sido elegida para protagonizar uno de sus episodios, es un honor, pero también una enorme responsabilidad.
