Selena, película dirigida por Gregory Nava, se estrenó en marzo de 1997 con Jennifer López encarnando a la estrella que se luego de su muerte se convirtió en una de las más recordadas y aclamadas artistas de la industria musical.
Esta cinta le dio a J.Lo la posibilidad de cobrar, por primera vez, un millón de dólares por proyecto, catapultándola y haciendo de ella una figura muy popular.
Y aunque lo hizo muy bien y la crítica elogió su trabajo, Jennifer no era la primera opción para quedarse con el personaje, pues al casting fueron convocadas decenas de actrices.
Ahora, 26 años después, la cantante boricua Olga Tañón, aseguró en una entrevista que los padres de Selena la contactaron para encarnar a su hija en dicho filme, pero ella lo rechazó porque no se sentía preparada en ese momento.