Este fin de semana se viralizó un video de un grupo de amigas que se quejaban por haber sido echadas a la calle de un restaurante en Polanco donde habían pagado una cuenta de 25 mil pesos. La protagonista es una periodista que ahora es apodada Lady Polanco.
En el clip que se volvió viral, explicaban que pasaban de la 1 de la mañana, hora del cierre del establecimiento, y se quejaban que las escoltaron a la puerta.
“Nos prendieron las luces, empezaron a barrer y todavía nos escoltaron a la salida, cual si hubiéramos sido delincuentes que no hubiéramos pagado la cuenta, y una cuenta tan cara como la que nos tocó pagar”, se escucha decir a la periodista Claudia Mollinedo, quien fue apodada como Lady Polanco.
La actitud de Mollinedo fue percibida como clasista y prepotente, lo que desató una ola de críticas en redes sociales, donde fue llamada “Lady Polanco”, como le ocurrió a Azalia, la ex Big Brother, tras un pleito callejero con un policía.
En consecuencia al escándalo, fue despedida de Imagen Televisión, donde colaboraba. Asimismo, la suspendieron como columnista del periódico El Independiente.
"Aquí se cierra a la 1, no cuando quieran" 🗣🗣🗣🗣🗣🗣
— •Angel (@spideymang) July 27, 2025
Obvio la gente ya trabajó y quiere dormir🤣#bagatelle #polanco #lady pic.twitter.com/vLKW5tJcn0
“Soy una persona que se equivoca”... Se disculpó
En un nuevo video, la periodista decidió disculparse con sus seguidores, familiares y ex centro de trabajo, en Imagen Televisión.
Admitió que se equivocó con el video viral... “Ese video fue imprudente, y sobre todo, mal planteado, y lo reconozco con humildad. Cometí un error al compartir algo tan delicado y sin contexto... abrió la puerta a muchas interpretaciones. Entiendo que el video pareció arrogante, altanero y hasta prepotente”.
Claudia anotó: “Les aseguro que esa no soy yo y quienes me conocen los sabe. Me toca asumir las consecuencias. Me duele profundamente haber decepcionado a quienes han confiado en mi trabajo durante estos años, también me duele haber afectado la imagen de un medio al que respeto, y que por ahora ha decidido apartarme, y lo entiendo.
“No me creo superior a nadie, no me creo intocable. Nunca fue mi intención usar mi voz para desprestigiar ni dañar a nadie”.
“Si ofendí, y contribuí de manera involuntaria a un discurso de odio que no representa mis valores, les pido perdón de corazón. Estoy dando la cara porque soy periodista pero antes de eso soy persona que se equivoca, que siente... Agradezco a quienes me han escrito con respeto incluso en la crítica”, insistió.