Ya sintió lo que es subirse en unos tacones.
Nos sorprendió mucho cuando vimos llegar al ensayo previo al estreno de Baño de mujeres a una rubia muy bien entaconada que resultó ser Gustavo Adolfo Infante.
De su transformación nos contó: “Perdí una apuesta con Ninel Conde gracias a mi productora que es muy creativa, hicimos la apuesta en vivo y dije “sí” pero no sabía en lo que me estaba metiendo”.
-¿Te tardaste mucho en maquillarte, en ponerte el vestido?
“Me tardé muchísimo, 20 minutos o media hora tardaron para ponerme la base de maquillaje, en pintarme los ojos, después la boca, después las pestañas, después la peluca, las medias, los tocanos, el vestido... muy complicado”.
-¿Pensaste que ser mujer era difícil?
“Nunca lo pensé, es muy complicado pobre de ustedes”.
-Seguramente acabas de vivir una experiencia inolvidable...
“Totalmente, dije que nunca lo volveré a hacer pero mañana sábado me tengo que volver a transformar en mujer prque soy el padrino-madrina del estreno de la obra Baño de mujeres”.