“Luego la gente queda con una cara atroz”, confesó César Évora al hablar de la edad y cómo se cuida para seguir igualito.
TEXTO: GRISEL VACA
César Évora, quien actualmente da vida a Jesús Rojas en la telenovela Qué le pasa a mi familia?, producción de Juan Osorio, acepta el paso del tiempo con orgullo y dignidad. El actor está feliz con la carrera que ha construido, y nunca le ha importado envejecer ni interpretar personajes incluso de mayor edad que él; al contrario, le gustan sus canas y nunca se ha considerado un “sex symbol” a pesar de su “pegue” con las mujeres. A sus 61 años vive un eterno noviazgo con su esposa, Vivian Domínguez, con quien lleva 30 años casado.
En las grabaciones de Qué le pasa a mi familia?, ¿cómo le ha ido?
“Muy bien, me siento muy seguro en esta producción. Juan Osorio lleva un buen control de la locación, del vestuario... de todo. Es un profesional. Además, se siguen perfectamente todas las medidas de sanidad y ya me acostumbré a usar cubrebocas y a ver a la gente con sus caretas.
En la historia da vida a Jesús Rojas, ¿se identifica con este personaje?
“Jesús es un hombre con una gran bondad, que ha evolucionado y ha encontrado el camino para tener paz y vivir de una manera honesta. Un amigo mío me dijo que es el personaje que más se parece a mí, no sé si sea verdad. Yo sólo trato de estar tranquilo y de llevar la vida en paz, a lo mejor es un papel que tiene lo mejor de mí.
¿Le gustan estos personajes o prefiere los villanos?
“Me gusta hacer siempre algo diferente, no me gusta encasillarme. No estoy peleado con esa parte de ser el villano, el bueno, el tonto, el loco, el cura del pueblo… Me encantan los retos y ponerme en la piel de otra persona que no soy yo.
Además, siempre ha hecho papeles que van de acuerdo a su edad, ¿nunca le ha preocupado el paso del tiempo?
"¡Para nada! Lo peor sería ir en contra de mi propia edad; de hecho, he interpretado personajes de mucha más edad de la que tengo y jamás he pensado: “¿Cómo voy a ser el papá de un galán de telenovela?”. Yo voy envejeciendo con mis personajes, hasta me dejo las canas.
Entonces, ¿no se haría nunca algún arreglito estético?
“Nunca me he operado ni pienso hacerlo, luego la gente queda con una cara atroz.
Sin embargo, sigue conquistando el corazón de sus fans, ¿se considera un sex symbol?
“Nunca me consideré un sex symbol, y cuando la gente se me acerca, siempre me dice cosas muy lindas; las señoras son muy amables y respetuosas conmigo, incluso los niños. Más allá de eso, la verdad no sé... “Te puedo decir que le tengo un respeto total al público y siempre he tenido los pies bien puestos en la tierra; llevo una vida normal, voy a todos lados y no vivo en una nube o en un castillo en el aire. No me creo mejor que nadie, ni creo que nadie sea mejor que yo.
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